V.A.S. ¡QUE DESILUSION!


El pasado domingo, mientras me dirigia al Imagina Club de Cádiz, mentalmente iba cantando temas de Cactus. Al volver, Leño y su "Que desilusión" se habia convertido en la banda sonora de aquella noche. La cosa prometia. Todo un master de la bateria como Carmine Appice, forjado en mil batallas, que ha compartido estudios de grabación y escenarios con lo mejor del rock and roll, visitaba el sur de la peninsula, en ese intento de emular aquel Beck, Bogert, Appice, esta vez convertido en Vargas, Bogert, Appice.

Tim Bogert se quedó por el camino, y tras la grabación del disco, decidió que para él, hasta ahí llegaba la cosa, asi que Carmine Appice, junto a su ahora compañero en King Kobra, Paul Shortino a las voces -quien tambien ha metido la voz en el disco-, y Javier Vargas a la guitarras, se embarcaban en esta gira española, con Luis Mayo, bajista de la Vargas Blues Band ocupando el lugar de Bogert.


Nunca habia estado en Imagina Club, y me sorprendio gratamente, una sala no demasiado grande, pero bien distribuida, y que hace que la gente se concentre frente al escenario, lo que da la sensación de lleno. Unas cien personas nos reuniamos alrededor de la leyenda. Appice y cia lo tenian todo a favor, un set list de ensueño y mucho nombre sobre el escenario, era cuestión de ver la reacción de tipos acostumbrados a grandes espacios en un sala reducida.

A las 22.30 aparecian en escena Luis, Javier, Carmine y Paul, dando comienzo con "It´s a long way to the top", un tema con el que te puedes meter a la gente al bolsillo desde el inicio, pero que sin embargo le falto fuerza. Tal vez la guitarra de Vargas no echaba las chispas que desprenden las de los Young y Shortino no tenia ese tono chulesco de Scott.  Primera oportunidad desaprovechada.  Eso si, Shortino no paraba de moverse ni un instante, al contrario que Vargas, muy parado todo el concierto, dando la impresión de estar en otra parte. Atacaban "Soul of love" de Paul Rodgers, y parecia mejorar un poco la cosa. 




"Black night" con su caracteristico riff levantaba al publico y parecia que la banda comenzaba a sentir la inspiración con el clasico de los Purple. Shortino seguia tomando protagonismo, con sus caracteristicos "bailecitos", a veces un poco esperpenticos, pero lo importante seguia sobre el escenario, con las miradas de la mayoria clavadas en Appice, sonaba "Must be love", y a continuación uno de los temas que mas esperaba, "Surrender" de Cheap Trick que no terminó de convencerme, y mira que da juego esa canción.

Vargas parecia ausente, en su rincón sin practicamente cambiar la pose, como si no encajase demasiado en el sonido hard rockero que imprimian al concierto, es curioso, porque he visto alguna que otra vez a la Vargas Blues Band y siempre he salido mas que satisfecho, y este Javier Vargas parecia otro guitarrista distinto, que ni siquiera hizo el solo de rigor. Llegaba la hora de uno de esos grandes temas que ha legado Appice para el rock, "Black cat moan" de su aventura con Bogert junto al maestro Jeff Beck, que no sonó mal, pero quizás es que las comparaciones son odiosas.


Shortino continuaba balaceandose, y a pesar de que no comenzó mal de voz, imagino que la proximidad entre show y show le estaba pasando factura, porque se notaba que no andaba para derrochar facultades. Otro  clasico, esta vez del mayor supergrupo que han dado las islas britancias  resonaba en nuestros oidos, "Politician"  de Cream, que daba paso a "Spoonfull", el clásico de Willie Dixon.

Shortino con Vargas traduciendole, rendian homenaje al desparecido Gary Moore, con "Parisienne Walkways", un tema que da muchisimo para lucirse con la guitarra y que quedo muy discreto, con un Vargas excesivamente comedido. Seguian los homenajes, y Shortino se marcaba a capella "Heaven and hell", muy emotivo, y que consiguió la complicidad de todos los que estabamos alli. Tambien hubo tiempo para que Shortino recordar su paso por Quiet Riot, antes de encarar "Livin´alone", donde pudimos comprobar el solo de bateria de Carmine, entretenido, incluso levantandose y haciendo cantar a la gente al ritmo de sus baquetas, con malabarismos incluidos, que nos sacó una sonrisa, pero que quizás tampoco hacia tanta falta el "espectaculo".


Otro de los momentos esperados, sin lugar a dudas era la version de "You keep me hangin on" de Vanilla Fudge, otra de las bandas por donde sonó Appice, que fusionaron con "Whole lotta love". Y si la anterior era esperada, no lo era menos "Lady", de nuevo de esa joya que grabaron Beck, Bogert y Appice, que esta sonó mucho mas inspirada, dejando constancia del grandisimo tema que es. A partir de aqui, para mi el concierto, aunque pegó un subidón en cuanto a animación, para mi, bajo en lo referente a calidad. Anunciaban "Do you think I´m sexy", tema de Appice que popularizó Rod Stewart, y que Shortino se encargó de destrozar, además ayudado por el tono tan rockero que quisieron darle. OK, no soy objetivo, Rod the Mod es una de mis debilidades, y Shortino en ningún momento sono sexy como el escocés.

Llegaba la hora de los bises, primero con la latina "Right on" de Ray Barretto, en la que Shortino se convertia en Celia Cruz y perdia los papeles totalmente, volviendose loco sobre el escenario e imitando el sonido del saxo, alargando tanto el tema, que se me hizo pesado.  Reir, nos reimos muchismo, pero.......... y para finalizar, homenaje a los hermanos Allman con "One way out", con el que se despedian de todos nosotros emplazandonos en el puesto de merchandising.


Ya sabeis que la alegria viaja por barrios, y después del concierto, hablando con la gente, habia algunos que les habia parecido un gran show, y otros con los que coincidia que no habian estado muy acertados e inspirados. Shortino se deja la piel en el escenario, pero su voz se resintió demasiado, Appice bien, quizás lo mejor junto a Luis Mayo que no fue mas que un convidado de piedra. Desconocido Vargas, muy apatico, apartado, e incluso a veces, daba la impresión que el ambiente entre ellos no era el mas indicado. Al terminar se quitó de enmedio, dejando el protagonismo a Appice y Shortino -el mas accesible a la gente-, algo que en las veces que le he visto con la Vargas B.B. ha sido lo contrario, un tipo que no ha dudado en pararse con todo el mundo. 


Igual me he vuelto muy exigente, o demasiado "especial", no lo se, pero lo cierto es que como decia mas arriba, para mi el concierto que dieron en Cádiz, Vargas, Appice y Shortino dejo bastante que desear, y eso que el ambiente era bueno y la gente tenia ganas. Quizás podriamos hacer mil conjeturas, sobre lo apropiado de este tipo de gira para un tipo con el curriculum de Appice, pero ya seria entrar en otras historias.

Comentarios

TSI-NA-PAH ha dicho que…
Como habras leido, mi imresiones son mas o menos las mismas aqui en Malaga!Por lo menos el escenario parece mas grande que el de aqui!
una decepcion mayuscula!
un abrazo
Mr. Thunderstruck ha dicho que…
Pues si que lo siento, una banda así no debería decepcionar en absoluto y por lo que veo ha sido un bluff. Incomprensible, ¡Qué manera de desprestigiar el nombre! Claro que por solo ver a Appice (ése era el motivo) merecía la pena, pero no es de recibo tal apatía. Saludos!!!
TwoHeads ha dicho que…
Que pena. Lo triste es que los músicos tambien son currelas y, a veces, lo crematistico está por encima de lo artistico. Asi pasan las cosas que pasan. A mi me pasó, ultimamnete con los Marah, correctos tirando a flojitos y los Del Tonos en una ocasión en que la banda sonora tras el bolo bien hubiera podido ser el que desilusion.
paulamule ha dicho que…
Pues con esa pila de clásicos es difícil defraudar. Es una pena que no pasaran por aquí porque a mí me hubiera encantado verles. En fin, otra vez será.
Salud.
Ofersan ha dicho que…
Quizas demasiado clásicos conocidos acaban dando un toque de verbena, una pena que no disfrutaras todo loque esperabas. Saludos
PUPILO DILATADO ha dicho que…
QUé putada man!!. Cuando un bolo empieza ya con decepción la cosa pinta mal y parece ser que así fue.

Creo que este tipo de artistas que hoy no están en 'el candelabro' deberían de cuidar más su profesionalidad y dejar 'la estrella' que fueron para ganarse por enésima vez al público que se gasta la pasta.

Saludos
Tyla DeVille ha dicho que…
Los años me han hecho ponerme muy en guardia ante ésta clase de ofertas, ya saben: "Hey, somos cuatro músicos de los 80's y nos hemos juntado a hacer versiones, ¡Ven a vernos!", ya que suelen producir el efecto de desazón que tan bien narras, Nortwinds.

Mis "Vaya decepción" serían The Misfits (aunque no tanto, ya que iba completamente sobre aviso e iba con 0 expectativas), The Queers (concierto-bola-de-ruido de 20 minutos) y Barón Rojo (o como no saber retirarse a tiempo)

Rock On!
Bergidum ha dicho que…
Lo siento hermano, yo estuve a punto de ir a verlos a Pucela pero pasé por ir a ver a Dianno y vaya decepción este también.

Lo que cuentas del Vargas es normal, nunca fue la alegría de la fiesta, el tiene su forma de estar y tocar que igual se contradice con la de esos otros 2 monstruos. Cada uno es bueno en lo suyo, pero así juntos no sé... yo hubiese pagado por ir a ver a King Kobra o a la Vargas con otra formación.

Por cierto a Javier lo vi en Ponferrada en mayo (o abril no me acuerdo) y venía con una banda de compromiso pero se lo montó bien.