SILVER HORSES - SILVER HORSES


Nunca es sencillo ser el chico nuevo, en ningùn aspecto de la vida. Aun recuerdo, cuando con once años, cambiamos de ciudad y entrè en un colegio nuevo. Con una serie de chicos que ya se conocian desde hacia 5 años, y que estaban hechos los unos a los otros. A pesar de que solo nos mudamos unos cuantos kilòmetros, con esa edad es un mundo nuevo, sin conocer a nadie, e incluso, sorprendido, dandome cuenta, como a los mismos juegos de siempre, les llamaban de una manera diferente. Afortunadamente, siempre he sido un tipo que se adapta muy bien a los cambios, incluso desde pequeño. Ademàs, siempre he conservado ese espacio de soledad que necesito para mi mismo, y que aun hoy en dia, sigo guardando en su correspondiente parcela.

Si extrapolamos aquello a cantar en una banda, y que de pronto, un tipo te llame al telèfono y te diga: "Hola, soy Tommi Iommi, si el de Black Sabbath. ¿Te interesa ser nuestro cantante?" Imagino que me pegaria varios dias sin dormir. Primero flipando, coño, soy el puto cantante de los Black Sabbath, pellizcandome para creermelo, nervioso a mas no poder. Luego pensando, ¿me aceptaràn los fans mas terribles, esos que diran, tuvimos a Ozzy y a Dio, ¿quien coño eres tu?, ¿Y la prensa? ¿y....?, supongo que debe ser acojonante, y asì se debiò de sentir Tony Martin en su dia,


Al bueno de Martin, le tocò lidiar con la epoca mas irregular de Sabbath, sobre todo a nivel de popularidad, y aun asì, dejò su impronta en los discos que grabò con la banda, discos que evidentemente no aguantarian un careo con los clàsicos de los Sabbs, pero que sin lugar a dudas, superan a los de muchos coetaneos, a pesar de no conseguir el reconocimiento por parte de gran mayoria de la gente del rock. Su estancia en Sabbath no fue todo lo idilica que habria soñado, con despedida para el retorno de Dio, y nueva llamada, cuando este decidiò poner pies en polvorosa, antes de telonear a Ozzy en Costa Mesa.

Tras la salida de Sabbath, Tony ha dejado buenas cosas, pero no ha conseguio estabilizarse, a pesar, de que sus discos con Dario Mollo en The Cage son excelentes, y aquel disco con Empire, mas que correcto, amèn de un par de buenos discos en solitario y sus colaboraciones con Moody y Marsden. Quizàs de los tres sustitutos mas conocidos del heavy metal, Tim "Ripper" Owens, Blaze Bailey y Martìn, el exSabbs, es el que ha pasado mas desapercibido de los tres, al menos en cuanto a los medios y la gente.

 
Ahora Martin, ha unido fuerza con Gianluca Galli (TIME MACHINE) y Andrea Castelli (SHABBY TRICK) y Matteo "Bona" Bonini (MGRB), para dar vida a este "Silver Horses", en el que se acerca al hard rock mas clàsico, de la vieja escuela de Coverdale, Led Zep o incluso de aquellos maravillosos Badlands, de Ray Gillen, y es que ademàs, el guitarrista Galli, es fan confeso de Jake E. Lee. Desde el inicial "Rub it on me", que tiene ese groove de final de los 70, y unas guitarras muy Whitesnake, con armònica incluida, que le da mas sabor aun a rock clàsico, pasando por "Run", mas heavy y potente, con una base rìtmica imponente, un gran trabajo guitarrero y un Tony Martin que se desenvuelve como pez en el agua.

"Life and soul" tiene ese inicio que recuerda horrores a Led Zeppelin y los antes nombrados Badlands, acùsticas brillantes y un Martin reconvertido en vocalista de varias decadas atràs, pero que bien suena esto. "Diamond sky" vuelve con ese inicio setentero, de hard rock que reconoce su influencia en el blues, y esa forma de cantar tan Plant, que Martin adopta de nuevo. "Secret service" tiene unas guitarras buenisimas, marcando riff para luego Martin dandole un toque mas moderno en la estrofa, conseguir un contraste estupendo. "Suddenly lost", balada con piano y voz, como en los viejos tiempos, que por momentos recorre caminos Coverdalianos, por otros algùn guiño de su paso por la banda de Iommi.


Comienza a sonar "Me", y ese riff inicial me trae a Rainbow a la cabeza, para en la estrofa cambiar de registro.  De nuevo sonidos setenteros de hard blues, con "Silver horses", derrochando clase. No nos engañemos, estos tipos suenan de escandalo, y Martin es un vocalista idoneo para el viejo hard rock. Un gran tema. "You're breaking my heart (don't do it)", me recuerda  a los temas mas Zeppelin de Whitesnake, curioso, ¿no?, con un estribillo pegadizo y directo. "You", tiene un rollo muy guapo, con esos coros, que te atrapa casi desde el primer momento.

Cierran el disco con "Who's holding on to you", bonitos apergios, la voz de Martin liderando desde el comienzo y dando pistas de que la intensidad va a subir por momentos, en este precioso medio tiempo que dice adiòs desde el caballo de plata donde ha decidido montarse ahora. Espero de verdad que Martin tenga suerte, mucha suerte. Se ha rodeado de muy buenos mùsicos, y ha dejado un gran disco, que huele por igual a setentas y a hard rock. Algùn dia, alguièn deberia reivindicar sus tiempos en Black Sabbath.

Comentarios

Unknown ha dicho que…
No tenía conocimiento, pero tras leer tu entrada me pondré a ello de inmediato. Hard rock setentero de calidad debe ser tenido en cuenta.
Saludos.
Julio Blez ha dicho que…
Si señor, otra banda de dinosaurios que se juntan para devolvernos al mejor hard rock. Espero que no decaigan como los Black Country Communion...
Anónimo ha dicho que…
Hi guys thank you very much for the fantastic review!! Gianluca