LIGHT AMONG SHADOWS - WELCOME.... BACK
¿Habéis visto ese anuncio de la Coca Cola Zero? En el que se la dan a
probar a la peña mientras esta piensa que es la de siempre. Pues a veces
pienso que con los discos habría que hacerle a la gente algo así o como
una cata a ciegas, para que se diesen cuenta lo estúpidos con los
perjuicios que muchos tienen con las bandas de aquí. ¿Por qué parece
tener más credibilidad un tipo cuando se llama Mikka que Miguel?. En
fin, es lo que nos ha tocado vivir, por desgracia. Y estas cosas se
hacen aún más evidentes, cuando te enfrentas a discos como el de Light
Among Shadows.
Me comentaba su guitarrista Adrien, que mucha gente al escucharlos pensaba que eran foráneos y después parecían cambiar su opinión al descubrir que no eran nacidos fuera de nuestras fronteras. Pero para ellos. Yo descubrí a la banda de forma muy curiosa, alguien me habló de ellos, escuché unos temas en Spotify y mi expresión fue “que cabrones como suena esto”. Su sonido orientado hacia el metal con fémina al frente y sonidos cercanos al metal sinfónico, pero huyendo de los típicos juegos líricos en la voz, tan saturados.
Me comentaba su guitarrista Adrien, que mucha gente al escucharlos pensaba que eran foráneos y después parecían cambiar su opinión al descubrir que no eran nacidos fuera de nuestras fronteras. Pero para ellos. Yo descubrí a la banda de forma muy curiosa, alguien me habló de ellos, escuché unos temas en Spotify y mi expresión fue “que cabrones como suena esto”. Su sonido orientado hacia el metal con fémina al frente y sonidos cercanos al metal sinfónico, pero huyendo de los típicos juegos líricos en la voz, tan saturados.
Ya por fin, con su disco “Welcome…back” en mis manos, no quiero dejar de
destacar la profesionalidad de la banda en todos los aspectos, no solo
la ejecución y composición de los temas, también el sonido y la
presentación del cd, con un espectacular libreto y una preciosa y
atrayente portada. Venidos desde Algeciras, con la vocalista alemana
Tatjana Kle, Adrien Fowl a las guitarras, Alejandro Tineo a la batería y
Christopher Red al bajo, consiguen con los 12 canciones que suenan en
este su segundo disco, dejar su seña y apartar toda la paja acumulada en
un género que tiende a saturarse.
Sin lugar a dudas, lo que más me llamó la atención desde el primer momento es la voz de Tatjana, capaz de sonar dulce y emerger en el colchón musical que tan bien construyen sus compañeros de banda. Desde esa inicial “Welcome… back”, de que tienen su correspondiente y espectacular videoclip, sobresale la fuerza de la banda, gracias a los riffs y esa batería que se deja la vida en la canción. El problema de muchas vocalistas de metal sinfónico (en mi opinión, claro está) es que suenan forzadas, no suenan naturales, y desde luego, este no es el caso, ni mucho menos.
Sin lugar a dudas, lo que más me llamó la atención desde el primer momento es la voz de Tatjana, capaz de sonar dulce y emerger en el colchón musical que tan bien construyen sus compañeros de banda. Desde esa inicial “Welcome… back”, de que tienen su correspondiente y espectacular videoclip, sobresale la fuerza de la banda, gracias a los riffs y esa batería que se deja la vida en la canción. El problema de muchas vocalistas de metal sinfónico (en mi opinión, claro está) es que suenan forzadas, no suenan naturales, y desde luego, este no es el caso, ni mucho menos.
Han sabido jugar perfectamente con la dureza de las guitarras
(sabiéndola contenerlas lo preciso) y las melodías, para crear ese mundo
épico que tiene que ir ligado a este tipo de discos. Es complicado no
rendirse ante estribillos como el de “Children of the underworld”. No
voy a diseccionar canción a canción, primero porque no tengo alma de
forense (a pesar de ser muy fan de los primeros discos de Carcass), y
segundo, porque este álbum es de esos que una vez que lo pones, lo
tienes que escuchar en su totalidad, algo primordial. Discos con tres
canciones excelentes y el resto a un nivel regular no terminan más que
en el cajón del olvido, pero lo cierto, es que este “Welcome…back”, me
lleva a escuchar una y otra vez desde la primera a la última canción.
De todas maneras, si quieres alguna pista para descubrir la banda, lánzate a escuchar las guitarras de “Of wonder and horror” o lánzate sin miedo a descubrirlos con un tema como “Lost in a sea of nightmare” donde incluso se entrevén algunos momentos cercanos al progresivo en las guitarras para rápidamente converger en un tema accesible y fantásticamente estructurado o ese mar de calma que es “Dreamshaping”. Lo dicho, grandes canciones, grandes músicos, gran producción, gran portada y gran libreto. ¿Algo más se podría decir? Ah pues sí, mira, que encima son del sur del sur.
De todas maneras, si quieres alguna pista para descubrir la banda, lánzate a escuchar las guitarras de “Of wonder and horror” o lánzate sin miedo a descubrirlos con un tema como “Lost in a sea of nightmare” donde incluso se entrevén algunos momentos cercanos al progresivo en las guitarras para rápidamente converger en un tema accesible y fantásticamente estructurado o ese mar de calma que es “Dreamshaping”. Lo dicho, grandes canciones, grandes músicos, gran producción, gran portada y gran libreto. ¿Algo más se podría decir? Ah pues sí, mira, que encima son del sur del sur.
Publicada por el menda conjuntamente con Rock in Spain
Comentarios
Saludos, Carlos.