POWER METAL, 5 DISCOS PARA VOLVER A ESCUCHAR



Es cierto, que el power metal, es un género que tengo muy olvidado, lo disfruté durante 15 minutos a final de los 90, pero acabé saturado, de esa avalancha de bandas con una propuesta excesivamente parecida. Tras la debaclé del hard rock a nivel de popularidad, con la llegada del grunge, el heavy metal, también quedo un poco aparcado, incluso para alguna que otra revista del medio. Pero hacia la mitad/final de los 90, Europa principalmente, se convirtió primero en una especie de reducto de bandas, y luego encabezo un nuevo despertar, comandado principalmente por bandas alemanas y de los paises escandinavos. Gente como Kai Hansen y sus Gamma Ray, fueron el autentico bastión (exceptuando por supuesto a gente como Maiden o Judas, que seguian girando y grabando, jugando en otra división). Comenzaron a aparecer grupos que ofrecian su propuesta de heavy metal de grandes dosis melódicas, ensalzando el trabajo hecho anteriormente por gente como Helloween, y basando su imagineria y letras, en fantasias épicas.


Un día, un buen amigo, me puso un disco. Sonaban impresionantes, en todos los aspectos, pero lo que tocaban, ya lo habían hecho Helloween. Incluso sus canciones eran mejores que las de los alemanes en esos días, pero, cada riff, cada coro, cada cambio, me hacia vivir un deja vu mental. Ese fué mi cese de relaciones con el power, dejandolo en ciertas escaramuzas esporádicas y concretas. Ayer, un comentario en twitter del dueño del blog Living at 33RPM sobre el nuevo single de Sonata Arctica, y la consiguiente conversación, me llevo a volver a buscar en mi estanteria, algunos de esos discos que disfruté en su día, y que áun hoy en día, me siguen pareciendo que mantienen un muy buen nivel. Tal vez no sean los más respresentativos, ni los mejores, pero son los que a mi me siguen reconciliando con el power metal que avasalló la escena en aquellos años.


1. SONATA ARCTICA - ECLIPTICA 1999

Los finlandeses Sonata Arctica, fueron, a nivel personal, la gran esperanza blanca. Ya se comenzaba a ver que eran muchos grupos los que se apuntaban al empujón que daba el power metal, y a pesar de que relativamente, eran los primeros años, se repetian esquemas peligrosamente. Las grandes dosis de melodias que Sonata Arctica aportaron a sus dos primeros discos, mostrando influencias del hard rock escandinavo, junto a esa velocidad comedida que daban a sus canciones, les colocaron rapidamente entre los favoritos de muchísima gente. Este primer disco, no se centraba tanto en el lado más èpico como hacían otras bandas. Canciones como el medio tiempo "Replica" o "Kingdom for a heart", mostraban el grandísimo trabajo que hacian estos tios. Desgraciadamente (y siempre como opinión personal), se fueron diluyendo hasta caer en la vulgaridad.


2. RHAPSODY - DAWN OF VICTORY 2000

Los italianos causaron furor en el mundo del metal de aquellos días, con sus discos orquestados, su sabor a banda sonora de pelis como Willows, su imagineria fantasiosa, aquellos teclados y coros, a pesar de que su reputación como banda en directo era inversamente proporcional a sus buenas reseñas en estudio.  Debo reconocer que no terminé nunca de conectar con ellos, incluso aquellos dos primeros discos que corrian de mano en mano, no terminaban de calar en mi, algo que si pasó con este tercer disco. La fórmula sin lugar a dudas era la misma, ecos medievales, muchísimos coros, doble bombo, grandilocuencia y épica desbordada. Igual es que mucho de sus fans no lo consideran el mejor disco de la banda, pero a mi sigue siendo el que más me gusta y el que he rescatado para esta entrada.


3. HAMMERFALL - LEGACY OF KINGS 1998

Tal vez, definir a Hammerfall como power metal, no sea demasiado acertado, porque lo suyo está más cerca del heavy metal tradicional, pero por relación espacio temporal, temática e imagen, aunque no tanto por sonido, si que se puede encuadrar dentro de aquella oleada que intentó volver a poner en un lugar predominante al heavy metal. Este segundo disco de los suecos es un auténtico cañonazo, una simbiosis de fuerza y melodia, con ese ritmo épico tan propio del heavy metal de los 80, que los ponia en posición de convertirse en herederos de Manowar o Manilla Road. Canciones como "Let the hammer fall", "Legacy of kings" o esa fantástica versión del "Back to back" de Pretty Maids, es suficiente justificación para tener presente este disco.


4. IMAGINATIONS FROM THE OTHER SIDE 1995

Espero que nadie se sienta ofendido por lo que voy a decir sobre la banda de Hansi, pero al igual que pienso, que este disco es una pasada, uno de los mejores discos de heavy metal  de la segunda mitad de la década de los 90, e incluso, sigue estando entre mis favoritos de todos los tiempos, creo que Blind Guardian se vieron beneficiados de la caida de popularidad del heavy metal. Con dos primeros discos simpáticos pero vulgares, se entonan algo más (muchísimo más)  con el tercero y curiosamente, sacan un cuarto en directo que suena muy bien, quizás como aviso a lo que vendria después. Se va todo a la mierda justo en el momento en que sacan esa joya llamada "Imaginations from the other side", y se quedan como bastión y muestra de que no todo estaba perdido, una vez olvidado el pasado y con ganas de buscar un nuevo mesias. Pero es que trás este gran disco, vuelven a bajar el nivel con un tostón como fue ese disco basado en el Señor de los Anillos, y no recuperarian el nivel nunca más.


5. EDGUY-THEATER OF SALVATION 1999


Si para mi, Helloween fueron en los 80 un golpe de aire fresco, una grandísima dosis de calidad con los Keepers, dentro de la invasión de lo que muchos llamaron Eurometal, posiblemente Edguy eran los descendientes directos de Helloween. Trás las movidas con Michael Kiske, uno de esos vocalistas que han dejando huello, aparecía un jovencisimo Tobias Sammet, dispuesto a ocupar su lugar y con muchísimas facultades para hacerlo, y vaya si lo consiguió. Este Theater of Salvation, fué para mi, su pica en flandés, su aviso de que ya no eran una promesa, sino una realidad. Mucha gente dirá que Mandrake es mejor disco, y tal vez lo sea, pero este del 99, los convirtió ante mis ojos, en los herederos naturales, y merecidos, de Helloween y eso es mucho, os lo aseguro. Un disco perfecto de comienzo a fin.

 

Estos son los cinco discos de power metal que me apetecia rescatar, volver a poner a sonar en mis altavoces. Podían haber sido muchos más, eso es evidente. He dejado fuera a conciencia, primero a Helloween, porque los alemanes, a mi entender, están más allá de esta etiqueta, fueron fundamentales en el heavy metal de los 80, cuando la etiqueta power metal, se utilizaba para definir el sonido de bandas norteamericanas como Vicious Rumors, nada que vez con lo que englobaria dicho concepto después.También he obviado a Kai Hansen y sus Gamma Ray, grandes impulsores y lideres espirituales de ese resurgir a final de los 90, porque también han escapado del encorsetado círculo de una etiqueta. Hay muchos otros grupos que dejaron su impronta en aquellos últimos años de los 90 y principio del siguiente siglo, Stratovarious, Kamelot, Angra.... pero estos cinco representan muy bien lo que fue aquello.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Todo mi respeto hacia la técnica de estos grupos, pero he de dcir que me parecenla cosa más aburrida del planeta. Supongo que para gustos colores.