THE WIZARDS - Rise of the serpent

Tengo en el salón un viejo cenicero que conoció tiempos mejores y que ahora yace oxidándose por el desuso. Tan solo lo utilizan viejos espíritus del recuerdo que me visitan en el silencio de la noche y comparten copas de éter mientras hacen aros con el humo que desprenden las sombras. Me revuelven con sus manos sin tacto los cajones y me dejan a la vista revistas que recuerdan lugares y momentos manchadas de huellas y contornos de dedos.

No se me erizan los vellos de la piel cuando noto su presencia porque los reconozco desde tiempos imperecederos. Siempre han estado conmigo, a mi lado, cerca de mis oídos. Anidaron en mi alma en los momentos fáciles pero a la vez difíciles.

Las formas cambian, giran en una metamorfosis que no siempre cruzar los albores de la eternidad. Eso solo está permitido para los espíritus que conocieron la magia, que se ganaron el derecho a deambular por mis pasillos como si fuesen propietarios omnipresentes de mi hogar. A veces se acercan a la aguja de mi tocadiscos y entre los giros perfectos de su circunferencia vuelven a resucitar los viejos ritos que les otorgó la inmortalidad propia de las deidades.


Mis ojos buscan atentos esa fuente de sonido capaz de hacer arder viejas llamas con materiales recientes. El sentido de la vista acoge la primera ráfaga y asiente con convencimiento. Su título muestra la conformidad necesaria, el renacer de la serpiente. Los viejos iniciados se aposentan en el nuevo disco de The Wizards. El sonido que amamos a muerte hace ya tantos años se reafirma como una fe de vida que sabemos no poder abandonar y a pesar de los coqueteos con otras formas de música, jamás traicionar. El nuevo lanzamiento de los de Bilbao resucita mis viejos amores correspondidos que aun perviven. La NWOBHM, Thin Lizzy, U.F.O, Black Sabbath, el heavy metal épico de los ochenta.... todo ese hard rock y heavy metal de tintes épicos y monumental que subsiste de por vida a la vez que se alinean junto a nuevos héroes como Horisont o Hypnos. Imposible no posponer tus armas ante el riff de "Apocalyptic weapons" y rendir pleitesía con tu puño en alto y el movimiento rítmico de tu cabello. Los estribillos convertidos en himnos de batalla se dan cita en "Destiny" como un grito de guerra con el signo del diablo como estandarte.


El inicio pesado de "Circle of time" que bebe de ese heavy de riffs arrastrados se convierte en artillería próxima a los mejores tiempos del heavy británico en su estrofa. Efluvios del mejor hard setentero en el medio tiempo "Distorted mirrors" con un gran solo de guitarra que se antoja como sabia aprendiz de canciones como "Child in time". Si abrimos el libro de las viejas plegarias eléctricas algún día nuevas generaciones descubriran que "Age of man" pervive entre sus surcos a base de un riff poderoso y directo más estribillo para gritar a pleno pulmón. Si alguien te pregunta por que es tan grande el heavy rock, sube el volumen. "Strings Synchronise" es puro heavy metal de décadas anteriores hecho con la frescura de un presente prometedor. Calma un momento tu ansia para escuchar con atención "Aftermath" y todo lo que encierra en si. No vuelvas a añorar a los primeros Manowar o Manila Road, The Wizards son tu bálsamo. "V.O.I.D. (Visions Of Inner Death)"  cierra el disco de manera majestuosa, ocho minutos de plena apoteosis. The Wizards se han marcado uno de los discos del año, un disco convertido en honor y orgullo para todos aquellos que amamos y sentimos el heavy rock.

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