RIOT -IMMORTAL SOUL- IMMORTAL MARK REALE
Vivimos en una sociedad coronada por idolos con pies de barro. Personajes que copan programas de máxima audiencia, y cuya mayor virtud, en casi todos los casos, no es su inteligencia, arte o aporte que deje un legado para el futuro. Seres añtaño anonimos, hoy populares, que cierran las puertas del reconocimiento, a aquellos, que al menos luchan por plasmar aquello que sienten o aquello en lo que creen.
El rock también está lleno de idolos, alguno que otro de barro, pero muchos sin conseguir el status de ser reconocidos, incluso por la misma gente del rock, al menos, nadie puede borrar de su historial, los años que llevan al pie del cañón. Ultimamente contemplamos, como los grandes nombres abandonan este nuestro mundo, a manos de la parca. "Don´t you fear the reaper", se está conviertiendo en el himno oficial de estos últimos tiempos. Estrellas del firmamento musical, nos han abandonado, en una racha que parece no tener fin, R.J. Dio, Gary Moore o Amy Winehouse son solo algunos nombres. Pero también nos abandonaron, eternos luchadores del rock, como Phil Kennemore o la muerte ayer, de Mark Reale, guitarrista y fundador de Riot, incansable perseguidor del sueño del rock and roll, que llevaba persiguiendo desde 1975, cuando formase Riot. Ayer, la enfermedad de Crohn, con la que llevaba bastante tiempo peleando, le ganó la partida, a los 56 años, dejando otro hueco vacio en las filas militantes del rock.
Riot ya conocian la tragedia. En 1994, Rhett Forrester, vocalista de la banda a principio de los 80, moria tiroteado dentro de su propio coche. Rhett sustituyó al primer cantante de la banda, Guy Speranza, al que un cancer arrancaria de este mundo en 2003. Y ahora es Mark Reale, quien con su guitarra les acompañara, alli donde vayamos los rockeros una vez finiquitado nuestro periplo por este mundo. Mark fundó Riot en 1975, y en 1977 veia la luz el primer trabajo del grupo, "Rock city", un fantastico album de hard and heavy, al mas puro estilo norteamericano, que junto a sus siguientes discos, les abriria las puertas para girar con AC/DC, Molly Hatchet o Sammy Hagar entre otros, y les llevó a tocar en los Monsters of Rock, autentico santo grial de la época.
Su mayor momento de gloria, al menos entre la parroquia mas heavy, la vivieron en el 86, con aquel fabuloso y potente "Thundersteel", una lección magistral de speed y melodias, con un inconmesurable Tony Moore a las voces, Mark a las guitarras, Don Van Stavern al bajo y Bobby Jarzombek a la bateria. Uno de esos discos, que sigue siendo el punto de referencia para muchos, y que realmente es injusto, pues la banda, facturó grandes trabajos ademas del mencionado "Thundersteel", que realmente están a la altura de este, e incluso superior, me atreveria a decir, al menos para mi.
Riot nunca desaparecieron del todo, a pesar de algún parón mas o menos prolongado. Si ya para 2006, Mark habia recuperado otro de los vocalistas que tuvieron mucho peso en la banda, como fue Mike DiMeo, encargado de las voces durante gran parte de los 90, en 2011, Reale decidia reunir la formación que grabó aquel aclamado "Thundersteel" en el 88, y lanzar, incluyendo a la formación del 88 a Mike Flyntz, que ya lleva junto a Mark, muchisimos años en la banda, este "Immortal soul", precioso título, que ironicamente, podria servir como epitafio del fantastico guitarrista.
La comparaciones son odiosas, pero evidemente inevitables, en este "Immortal soul" con aquel "Thundersteel", sobre todo, porque Riot suenan muy duros y rápidos, rememorando aquel power metal -no confundir con lo que a final de los 90 se dio a llamar power metal- made in U.S.A. Desde la inicial "Riot", un tema speedico con unas guitarras que echan fuego, y un Moore castigando su garganta, al mas puro estilo de los cantantes de heavy metal clásico. Riot se meten en una autopista, y parecen ir sin frenos, algo que podemos seguir comprobando en "Still your man", y esos riffs de reminiscencias Maiden y golpes de classic metal, aderezados de grandes dosis de melodia.
Los apergios que anuncian "Crawling", sacan a la luz el amor de Mark por Blackmore, algo muy presente en toda la discografia del grupo, con un Reale demostrando que es un gran guitarrista, y toda la banda atesorando y derrochando tecnica, porque aunque Riot nunca hayan conseguido el reconocimiento masivo, la calidad siempre ha sido su propuesta mas importante. Vuelta a la caña y la melodia a partes iguales con "Wings are for angels", con una bateria que marca el camino golpe a golpe, con una precisión milimétrica. Si estamos hablando de rememorar los 80, pero sonando actuales, no volviendo a copiar la formula al pie de la letra, no podia faltar un medio tiempo, y "Fall before me" cumple el requisito requerido, aunque no se adapte a los cánones de este tipo de canción, pues alberga pasajes bastante potentes y unos riff brutales.
Riot siempre han sabido explotar el sonido de sus guitarras, y "Sins of the father", con ese riff ultra veloz, vuelve a escribir la palabra heavy metal, bien clara sobre la mesa. "Majestica" es una corta y precisa instrumental, que sirve de puente para llegar al tema título, "Immortal soul", una canción que me ha recordado a los Queensryche de principio de los noventa, con ese tipo de temas elegantes, que tan bien sabia hacer la banda de Geoff Tate, y que Riot también bordan. Mas riffs motherfuckers, esa es la consigna, e "Insanity" no pierde comba, adentrandose en un sonido mas hard n heavy, con un pegadizo estribillo que redondea el tema.
Mark Reale, además de reivindicar aquella epoca speedica, no olvida sus origenes, mas cercanos al hard rock, y en "Whiskey man" queda patente, con un estribillo que va directo al cerebro. Ya comentaba antes, que para estos tios, ademas de hacer buenas canciones, tocarlas bien es una prioridad, y otro ejemplo claro es "Believe", guitarras potentes, melodias y una sección ritmica imponente. Para cerrar este disco de almas inmortales, "Echoes" resucita la esencia de este disco, ese heavy metal rapido y melódico, que tiene los pies puestos en pleno siglo 21 y la cabeza en los años 80.
"Immortal soul" es sin lugar a dudas, uno de mis discos favoritos de hard n heavy del pasado año, y por desgracia, puede que sea la última vez que tengamos a Riot, al menos, será la última con su creador y alma mater, Mark Reale. Como cantaba Yosi, "que se cierren las fronteras, en el pais del rock and roll, las guitarras ya no suenan...", desde este humilde blog, va mi homenaje a alguien que me ha hecho pasar grandes momentos con su música, y a quien siempre recordaré, de la mejor manera que podemos hacerlo con alguien que vivió para la música, escuchando sus discos. Descanse en paz Mark Reale y viva Riot.
Comentarios
NO he escuchado nunca a Riot pero gracias a tí y a una reseña negativa en el Popu me voy a poner con "Thundersteel" y el último.
saludos hermano