CALIFORNIA BREED - CALIFORNIA BREED


Seguramente, lo que os voy a contar, os parece una tonteria, pero es cierto. A raiz de abandonar Black County Communion, le he pillado algo de mania (bastante) a Joe Bonamassa. Siento auténtica veneración por Glenn Hughes, me parece el cantante más grande que ha dado el rock, y lo de Bonamassa, a pesar de que el negocio musical es así, y el guitarrista tenia sus planes, algo lógico y dado su status, no queria vivir o convivir a la sombra de nadie, a mi me pareció, como una especie de traición. Pero la vida sigue, y Glenn quiso seguir adelante, pero Derek, decidió poner sus teclados al servicio de Bonamassa, por lo que, Hughes y Jason Bonham, se quedaban compuestos y sin novia. A pesar de mi estado gruñon hacia el buen guitarrista, debo decir a su favor, que no debe ser sencillo confrontar agendas con un tipo como Glenn Hughes, que siempre está metido en mil saraos. Pero claro, en estos casos, uno se pone de parte de quien mejor le cae, y en este caso, yo me quedo con el bajista y el batería.


Hughes y Bonham aparecen con un nuevo proyecto, acompañados de un joven guitarrista, Andrew Watt, 23 años, y que muchos llaman el nuevo Hendrix, algo que personalmente, no creo que beneficie a nadie, levantar comparaciones con gente del tamaño de uno de los más grandes guitarristas que ha dado el mundo del rock. Aún así, a pesar de su casi, insultante juventud, Andrew se presenta como un serio candidato, a esa pleyade de guitar heroes, especie a la que a los hard rockers, tanto nos gusta rendir pleitesia. Así que California Breed, es el nuevo proyecto de Hughes, Bonham y Watt. Un power trio a la vieja usanza, donde dar rienda suelta a sus sonidos favoritos, el viejo hard rock, ese que Glenn contribuyó a crear, que Jason mamó desde pequeño en casa y que Andrew seguro que también ha tomado la suficiente nota, porque en este disco debut, se nota.


Decir que la voz de Hughes sigue siendo excesiva, enorme, con una fuerza descomunal, de esas que solo aquellos tocados por la varita de los dioses, son capaces de poseer y conservar, ha sido expuesto y repetido hasta la saciedad, pero es que es la más absoluta verdad. No deja prisioneros, porque sigue reivindicando su puesto en el olimpo, un lugar que no piensa abandonar. Ya sabemos de sus habilidades al bajo, y de la potencia de pegada de Jason, digno hijo de su padre. Entre ambos aportan una contundencia brutal, junto al maravilloso trabajo guitarrero de Andrew. Aqui todo se mueve en clave hard rock, pero también hay esas florituras cercanas a otros sonidos, que tanto gustan a Glenn, como en "Days they come" por ejemplo.  Sin dudas, California Breed es el siguiente paso tras B.C.C. Las directrices son las mismas, puesto que sus bazas son iguales, pero Andrew no intenta ser Joe, es él mismo.

Me podria poner a diseccionar las doces canciones que conforman este disco, pero, ¿es necesario?. California Breed (el disco), es un todo. Compacto, equilibrado. Potencia a raudales en temas como "Sweet Tea" o "Midnight oil", el sonido setentero y oscuro de "Invisible" o  las reminiscencias funk de "Spit you out", son solo una muestra de lo que encontrar en el disco. Parece que la alianza Hughes/Bonham sigue dirigida hacia buen puerto, y eso nos puede hacer disfrutar muchísimo del duo. Andrew es un gran descubrimiento. Ojalá el bueno de Glenn, pueda mantener la banda y seguir dando canciones de este calibre. Pedirle que se centrara en un solo proyecto, es como intentar perseguir el viento.



Comentarios

Unknown ha dicho que…
Me has ganado con lo de Glenn Hughes: me parece una mala bestia. Sus discos en solitario me encantan; y con su nueva banda, lo petará. Gran entrada, Carlos :)
bernardo de andres ha dicho que…
Como bien dices haber si Glenn se serena y da continui82 98562239dad a proyectos como este con ese sonido hard soul