CAI, MÁS ALLÁ DE NUESTRAS MENTES DIMINUTAS EDITADO EN SUECIA

Las riberas del oficialismo y la oficialidad, se convierten muchas veces en playas atestadas para aquellos que no sienten la necesidad de dar un par de pasos más allá, y encontrarse con aquello que existe, no al margen, pero si en un pequeño rincón de aquellos que pretenden ser los elegidos para contar la historia. En este país, a veces me da la sensación, que pretenden saltar de Los Bravos o Los Sirex a la dichosa movida madrileña, empapando por el camino, a todo lo que tuvo fuerte presencia, del barniz del olvido, la ignorancia o la mera anécdota. Es injusto, no dar el valor que se merece, por ejemplo, a la escena del rock progresivo que se forjó en nuestras fronteras allá por los setenta y principio de los 80. Evidentemente, yo no viví aquellos días conscientes de lo que se cocía en las cocinas musicales (soy del 72), pero el descubrimiento con el tiempo de aquellas bandas, me ha dejado constancia del nivel que se profesaba en estos lares.

Nombres como Maquina!, Companya Electrica Dharma, Iceberg, Goma, Tapiman, Cerebrum o Fusioon, y por supuesto, todo el movimiento surgido en Andalucía, primero por Smash, y luego refrendado por Gong, The Storm, Triana, Imán y por supuesto Cai. Resulta curioso (y merecido) el halo de culto que profesa por ejemplo el Kraut Rock alemán, mientras que no le aplica a todo ese movimiento creado en aquellos años de despertar a la libertad, y de ganas de romper los esquemas. El guitarrista Salvador Dominguez, escribió un interesante artículo sobre el prog en España en su blog, que podéis leer pinchando aquí. El rock progresivo, siempre ha sido excesivamente ecléctico como definición, tanto, que en sus redes se agrupan bandas, que no forman una homogeneidad musicalmente hablando.

Una de esas bandas fueron Cai, procedentes del sur del sur, en cuyas filas militó en pianista Chano Dominguez. Su querencia musical surcaba por mares tanto del prog de gente como EL&P, como por el jazz rock o jazz fusión, próximo a Return To Forever o Heavy Weather, sin olvidar por supuesto, la cercanía al flamenco, que los podia alinear junto a Triana o Alameda entre otros. En 1978, lanzaban su disco debut, "Más allá de nuestras mentes diminutas", un enorme trabajo, rebosante de calidad, donde demostraban el grandísimo nivel que atesoran todos y cada uno de sus miembros, tanto a la hora de componer, como de desarrollar las canciones. Chano Dominguez (teclas y cuerdas), Diego Fopiani Macias (bateria y voz), Jose. A. Fernandez (guitarra),  Jose Laureano Velez (bajo y voz) y Paco Delgado Glez (guitarras), reflejaron en cuatro canciones y 33 minutos, su forma de volatizar las fronteras que pretenden encajonar la música.

En estos días, se anunciaba, que su disco, ha sido editado en Suecia,  por el sello Tone Arm, lo que confirma aún más, en estos tiempos de reediciones y revisiones de bandas que formaron parte del camino del rock décadas atrás, la valía de los gaditanos, y de la escena en general de aquellos días inciertos. Para mi, es una alegría el reconocimiento, aunque solo sea una gota de agua en un inmenso océano, de la música de mis paisanos. Va siendo hora que el Rock Andaluz, no se quede el el signo de admiración cuando se habla de él, sino que sea real y efectiva, esa deferencia de reconocer su valía, su majestuosidad, su significado en una sociedad que comenzaba a vivir nuevos tiempos y queria mirar hacia delante, sin olvidar su cultura, pero abrazando aquello que la enriqueciese, como ha hecho durante toda su historia, a pesar de la represión, de los poderes fácticos unas veces y de las supuestas mentes bien pensantes, otras, que han intentado sumergirla en un mundo de clichés prefabricados. Su música,nuestra música, permanece más allá de las mentes diminutas de muchos.