EN LA MEMORIA: LEÑO - Vivo 83
Creo, que muy pocas cosas se le pueden reprochar a Rosendo, si hay alguien en este país que sea un ejemplo palpable de honestidad brutal, sin lugar a dudas es el de Carabanchel. ¿Maneras de vivir?, puede ser, esa es la que ha elegido y la que lleva a cuestas. Como decía, poco se le puede reprochar, ni a él, ni a Tony Urbano y Ramiro Penas, si nos centramos en su historia como Leño, lo único, que nos hayan dejado huérfanos de más material, pero es que hasta para eso, fueron consecuentes, y decidieron poner punto final, aquel día que decidieron que a partir de entonces, su camino como banda comenzaría a rodar cuesta abajo, o al menos, algún escalón por debajo de donde se encontraban en ese momento. Recordemos que estaban girando junto a Miguel Ríos y Luz Casal. Habían lanzado "Corre, corre", donde consiguieron un equilibrio vital entre la instrumentación y el mensaje que residía en las letras, clamor popular de la vida de barrio de aquellos ochenta en la capital del reino.
Leño es algo que ya no podremos vivir, (sus miembros durante distintas épocas siempre declararon que no era posible) descartada por motivos obvios la reunión clásica, la original incluiría a Chiqui Mariscal, que tampoco sería posible desgraciadamente, después de la muerte tanto de Tony Urbano como de Chiqui, es poco el material a que podemos agarrarnos para disfrutar de una de las bandas más influyentes del rock de este país. Pudimos disfrutar un breve oasis en 2010 cuando salió "Bajo la corteza", siempre siendo conscientes de que aquello no era la llave a nada. Como decía, más allá de sus tres discos de estudios, y aquel directo del 81, más un puñado de recopilatorios, se reduce el círculo de grabaciones de la banda, por lo que la edición de este directo con dvd incluido, supuso para muchos de nosotros, como ese regalo que llevas tanto tiempo esperando. Grabado en el 83, cuando eran una maquinaria perfectamente engrasada, inmersos en aquella gira de "El rock de una noche de verano", este concierto se grabaría en Barcelona un 6 de septiembre, mostrándonos una banda que era la máxima esencia de ese sentimiento callejero del rock and roll, sucio, desesperado y mordaz.
Escuchar el disco es tratar de revivir una época imposible, una forma de entender el rock, con un set list que da envidia, como una enciclopedia del mejor rock facturado en el idioma de Cervantes. Acompaña al disco un dvd con imágenes de actuaciones durante el 82, documento testimonial de la forma, la manera de vivir de un grupo mítico. En el altar de los héroes, seguro que se acumulan mucha gente a la que rendir pleitesía, gracias a una serie de canciones inimitables. Rosendo, Tony y Ramiro se ganaron en su día por derecho propio, figurar en el camino de los grandes, donde deberían estar acompañados de una generación de músicos que aunque para muchos se ajusten a la segunda división de la memoria, por justicia, por valor y por historia, como Bloque, Topo, Mermelada, Asfalto, Storm... son parte de nuestra cultura.
Comentarios