SANDFORD MUSIC FACTORY - Natural behavior

A raíz de reseñar  "Jofre", la aventura acústica de los gallegos Sandford Music Factory en acústico en Rock The Best Music, me quedó la espina de no haberle dedicado tiempo a escribir sobre su anterior disco, "Natural behavior", en el que no se si como título profética mostraban sin complejos que la electricidad es su comportamiento natural, aunque después de ver como estos tipos llevan sus canciones al formato acústico, uno ya solo tiene claro que la naturalidad cuando hablamos de Sanford Music Factory es el talento. Lo primero que destaca en esta tercera obra de los gallegos es el grandísimo sonido que tiene este artefacto. La figura del productor, algo tan importante desde siempre en la historia del rock parece haber pasado a ser algo prescindible. Imagino que gran parte de culpa la tiene esa crisis interminable del negocio musical del que las grandes compañías discográficas no se parecen conseguir reponer , quizás porque tampoco han asumido que tuvieron parte de culpa por no verlo venir y por el abuso que llevó su forma de actuar durante mucho tiempo (eh, y el público también tenemos nuestra gran parte de culpa, que aquí nadie pretenda escapar sin las manos manchadas). También imagino que la instauración de la cultura del yo mismo me lo hago porque la tecnología me facilita los medios, tiene que ver en que ya muchos no se molesten en leer quien es el productor de la obra en cuestión. El caso es que la mano de Alan Douches en la masterización y co producción además de Luis Antelo se nota por el bien del disco.

Pero los grandes protagonistas sin lugar a dudas son Sandford Music Factory (a los que yo me empeño una y otra vez en cambiarles el Factory por Express, maldita neurona) que ponen todo su buen hacer y buen tocar al servicio de un disco que no tiene puntos flacos. Su conglomerado de hard rock y sonidos tanto de los noventa (a mi Eddie Vedder se me aparece una y otra vez cuando escucho a la banda al igual que algún compañero de generación) como de terrenos más clásicos se deslizan para mayor gloria de la banda y gozo del oyente durante las diez canciones que forman este disco. Sin lugar ni opción a la monotonía, y tirando de cliché diría que es un disco jodidamente redondo, para subir el volumen y dejarte llevar sin prisa ni pausa, perdido en las canciones que nos propone. Y rabia, si, cuando veo que un disco así tiene que ser autoproducido. En 2017 vió la luz "Natural behavior". Solo hace unos meses "Jofre", que parece que al final si van a editar en formato físico. Gran noticia. Hazte un favor y empápate de las canciones de Sandford Music Factory.