TIPARRAKERS - Elige tu camello

Apretando los puños se vive mejor. No se donde lo escuché. Tampoco me parece que sea real. Puestos a apretar los puños más vale apuntarlos certeros al rostro en cuestión que te toque las pelotas. No estoy promoviendo la violencia. Como si hiciese falta en esta sociedad que hemos construido. O si alguien fuese lo bastante imbécil como para no pensar por si mismo y dejarse llevar por falsos profetas que abundan en estos tiempos de redes sociales y programas de televisión preconcebidos sentados en el baño mientras lo que el gana pasta de turno no es precisamente los puños lo que aprieta. Hablo de golpear con hechos y palabras cuando te ponen contra la pared. Me acuerdo de aquella canción de Barricada pero tampoco pretendo crear malentendidos, que estamos en una época en la que existen más ofendidos que personas con capacidad de ofender. Siempre te puedes encontrar con alguien como este que es hijo de matador y de, de, bueno no podría deciros a ciencia cierta a que se dedicaba su madre. Que hace unos días acaba de coronarse -de nuevo- con otra declaración de esas que suele hacer. Y no creo que sea cuestión de ideas u oficios, sino de vivir con el cerebro a ralentí.

Aprieta los puños y escupe palabras, golpea a base de guitarras. ¡Dios salve al punk!. Que no nos falte nunca, que jamás tengamos que buscar nuestro propio puente en Putney Bridge para saltar. Como cantaba Ramoncín, si nos falta el punk, con quien vamos a pelear. Tiparrakers han vuelto aunque nunca se hayan ido. Son mi puta debilidad norteña junto a The Inductions. ¿A quién quieres más, a papa o a mama?. Pues eso. En las pelis un revolver tiene seis balas. Este "Elige tu camello" de Tiparrakers tiene diez. Munición de sobra para no dejarte indiferente, ni sentado en tu puto butacón. El punk recorre rabioso la ría. Ya lo digo siempre. Desde Melbourne a Bilbao, Tiparrakers vienen por toda la orilla. ¿Quieres sopa?. Toma dos tazas con "Recuerdos de Corea". Agarrate que vienen curvas. Ahora Jon Ander, Iker, Jero y David tienen compinche nuevo Xenen y esto marcha a todo tren. Duro, crudo, conexión Bilbo/Barakaldo para la canción que da nombre al disco. Mandoble directo a la mandíbula. "Doble condena" baja la velocidad pero marca el riff y sube el protagonismo del bajo.

"El ojo" vuelve a poner el pie en el acelerador, genial la melodía de Jon Ander y esas guitarras que van dando fuerza. Por cierto, suena muy bien este "Elige tu camello" la producción cojonuda. Una de mis favoritas del disco es sin dudas "Su eco". Rabiosa. Mirando de frente. Estribillo pegadizo. Puro punk rock. Puro Tiparrakers. "Vater dorado" abre la segunda parte del partido. Más tralla. Sin hacer enemigos y te lleva directo a "Código del hampa" donde brilla la melodía -a los Tiparrakers, no confundamos conceptos- cortante y directa. "Cabeza mármol" te vuela la cabeza -de mármol o la que tengas-. Patada donde ya sabes. Fuerte, cabreada, ritmo imparable. ¿Querías punk?. "Gafas de Oro" va cerrando el disco y te lleva a "Demoledor" que la han recuperado para este disco y yo que me alegro porque es una de mis canciones favoritas de la banda, una auténtica pasada y que contiene esa declaración de principios que dice "...quiere ser capitán de una banda de tipos que escupe rock and roll al hablar...". ¡Discazo de Tiparrakers!. ¡Y es lo que hay, cojones!