THE LIMBOOS - Baia

Siempre me ha gustado mucho la noche, lo reconozco. Y me he dejado confundir por ella todas las veces que he podido. Amores de contrabando en la barra de un bar y con suerte en el baño. Amores furtivos con nocturnidad y alevosía. Amores para el recuerdo pero no para el futuro. Copas en compañía, nunca en soledad. Brindis por los que no están y por los que nunca quisieron estar. Ellos se lo perdieron. Besos con sabor a ginebra. Sonrisas ebrias y abrazos on the rocks. Siempre me gustó la noche. Lo sigue haciendo, sobre todo en el momento en que el reloj se vuelve borroso y ya todo es cuesta abajo. Noches en compañía. Pero también me gustan las noches en soledad. La que uno elige cuando necesita sentirse bien consigo mismo. Noches con libros y café humeante. Sabor a barrica de roble con un solo hielo mientras suena aquella canción a un volumen no demasiado atronador. Noches de caricias cómplices en el reino del sofá con esa vieja película de fondo. De besos y guiños. De amores para siempre. En la noche cabe todo. Sobre todo cuando te enamoraste hace demasiado tiempo de la noche.


Es por la noche y no hago planes. Hoy se me rompió el reloj y en cierto modo me he alegrado. Cambian la hora, pero a mi me da igual. Hace tiempo que decidí no cambiar. Cierro la ventana. Se me rompió el botón del volumen de tanto subir. Es lo que tienen los equipos viejos. Que siguen funcionando pese a todo. Como aquella canción. La casa está sola. Al menos de momento. Aullo a la luna ahora que nadie me ve. Suena una canción. "Big shot" dice llamarse y abre el nuevo disco de The Limboos. Nadie como el viejo rock and roll para este viejo camarada de arrugas curtidas bajo los ojos y espíritu punk. The Limboos son los compañeros ideales para la noche. Al menos para la mía. Deberías de probar si para la tuya. Suena el timbre, pero yo a lo mío. Muevo mis caderas, con más ganas que gracia ante los ritmos latinos de "La descarga". The Limboos son gallegos y yo del Sur del Sur pero somos negros y lo sabemos, por eso cantamos a dúo "Do right". Podemos bailar pegados "Till the end of the time" y pensar en Sam u Otis mientras lo hacemos. Así podría llegar hasta el final pero me apetece dejar de escribir y dejarme llevar. Podría estar en el Copa Cabana, la banda sonora evoca momentos o tal vez buscando unas monedas que poner en la jukebox, siempre y cuando desde el escenario sonasen las canciones de este "Baia" de The Limboos. Se cierra la noche, pero siempre es joven a pesar de estar ahí desde el inicio de los tiempos.


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