THE STEEPWATER BAND - Turn of the wheel

A veces las circunstancias del momento marcan situaciones. Acontecimientos que se alinean para influir en el devenir de ciertos asuntos encasillándolos. Y no siempre se retoman cuando los vientos soplan hacia otro lado. Es parte de nuestra condición humana. Esa que nos hace a la vez imperfectos y únicos. Que nos distingue del resto de especies que habitan este maltratado planeta nuestro. A veces para mal. Otras para bien. Algo así me pasó con The Steepwater Band. Los festivales suelen representar una buena oportunidad para disfrutar en un solo día de un puñado de bandas. Más aún cuando son capaces de presumir de ofrecer un cartel ecléctico siempre dentro de un orden. Pero claro, también  representan que se produzca un sesgo a la hora de comparar sensaciones. Como decía más artiba, esto puedo aplicar a mi experiencia con The Steepwater Band. Su paso por el festival Serie Z creó un cisma entre ellos y yo. Aquella tarde no conecté con su propuesta. Es posible que la sobredosis de energía que aplicaron bandas que tocaron antes que ellos ayudasen a ello. La indolencia de la banda también. Al menos durante buena parte del concierto. Repito, esa fue mi percepción. Me siguieron pareciendo una banda fabulosa pero totalmente fuera de sitio. Así son las cosas.



Con este “Turn of the wheel” hago borrón y cuenta nueva. Llega el tiempo de intentarlo. Borrando cualquier pensamiento preconcebido que mi mente arrastre. Reconozco que la canción que abre el disco y a la vez le da nombre, vuelve a poner las cosas en su sitio. Llámalo reconciliación. O como te de la gana. Pero esas hechuras a The Black Crowes que se adivinan tanto en ella como en la siguiente, “Trance”, se convierten en cura. En remedio. “Running from the storm” sabe a asfalto, a rueda quemada, a cable de acelerador maltratado. Aunque le falta un poco de rudeza a pesar de que el sonido de guitarras añejo atrapa. “In the dust behind” es un medio tiempo sin problemas ni preocupaciones de intensidad, con ese sonido sobrio y ligero a lo Stones. Algo que percibí en “Running from the storm” y me vuelve a ocurrir en  “That’s not the way” es que la producción de las guitarras me recuerda a Neil Young. En “Big pictures” se hace mas evidente aún y es que la canción en si es más que un evidente guiño a las enseñanzas de Young. “Please the believer” vuelve a poner en primera fila el espíritu más rockero de la banda. Y no oculto que me siento más cercano a The Steepwater Band en este tipo de canciones.

Blues distorsionado para “Lost on you”. Paraje oscuro. Ticket a Texas. “Make it right” es puro classic rock a lo Bachman Turner Overdrive. Disfruta el solo de guitarra. “Abandon ship” es otro medio tiempo donde de nuevo se dejan entrever las pasiones por Jagger y Cia. “The peace you’re looking for” pone punto y final al disco. Me convence este “Turn of the wheel”. Si. Pero ciertamente en 3/4 partes del disco. La otra parte no la considero mala pero quizás si prescindible. O menos relevante si lo preferís. Vivimos unos tiempos en los que el rock de factura más clásica viene cargado de numerosos aspirantes que presentan buenas maneras. The Steepwater Band tienen ganado su sitio del que seguramente nadie mueva. Aunque vean como alguno que otro les pasa por el lado.


Comentarios