CHRIS STAPLETON - Starting over (2020)


No existen las medias tintas, mentiras y verdades a precio de saldo. Sírvase la cantidad que le apetezca. Espero que traiga bolsa de casa. La era de mucho que decir y poco que escuchar. Ya nadie guarda secretos de alcoba, prefieren rumores de rellano en la escalera. Con la puerta entreabierta y un ojo cerrado. Las proposiciones deshonestas pierden su gracia cuando se convierten en costumbres para provecho propio. La felicidad servida en bandeja, no vaya a ser que buscándola descubras que no es oro todo lo que reluce y que el cobre destiñe con las primeras gotas de lluvia. Cuando todos los altavoces tienen el volumen al máximo al final nadie consigue entenderse. Es tanto el pretendido y exacerbado derecho a la opinión propia, que hemos terminado olvidando que errar es de humanos en una sociedad en la que gustamos de matar dioses. 


Por eso cuando encontramos que aquello capaz de emocionarnos se descubre en la aparente sencillez de esa envenenada pasión llamada música, ondeamos con orgullo la bandera blanca que ponga fin al armisticio y nos entregamos sin condiciones. Al menos mientras la música suene. Y pasa con “Starting Over”, donde Chris Stapleton nos ofrece a manos llenas uno de esos discos que no necesita explicaciones, tan sólo cerrar los ojos y dejar que se te erice la piel mientras suenan sus canciones. Los sonidos americanos encuadernados como un libro del que devoras ávidamente sus capítulos. Una ofrenda de vida hecha canciones. 



Cada cual tendrá sus favoritas, que los sentimientos van por barrios pero cada casa es un mundo. Los sonidos sureños de “Arkansas” con sus guitarras poderosas, la intensidad soul de “Cold”, capaz de calar mis huesos y reconfortar mi alma, el blues de “Whiskey sunrise” y el arraigo a la tierra propia de “Nasville TN” son las mías, las que guardo en mí sayo para combatir el frío del invierno. No olvides hacer lo propio con las tuyas, que son los corazones quienes eligen que les reconforta. Stapleton no olvida reivindicar a quien a él se lo hace, poniendo su espíritu en otras de John Fogerty y Guy Clark. Un disco fabuloso, con una sobria portada que te susurra que la belleza está en el interior.

Comentarios

Rockologia ha dicho que…
Mucho postcast, mucho postcast, pero lo que mejor haces es escribir. Excelente.