Series: TREME

 

Si tuviese que definir Treme con una sola palabra, esta sería, maravillosa. ¿Sabes por qué?. Da igual que su argumento pueda llegar a sufrir vaivenes durante ocasiones puntuales en sus tres temporadas, que algún personaje se pueda llegar a atragantar o que incluso la interacción de algunos personajes pueda parecer metida con calzador. Sí, da igual, porque ese fondo musical constante como gran protagonista de la serie, supera cada bache, que aunque mi exposición anterior pueda dar a entender que son muchos, lo cierto es que son pequeños sobresaltos en una serie que me atrapó desde el primer día que decidí comenzar a disfrutarla.

Treme no solo relata y retrata el romance constante de New Orleans con la música, más allá del reclamo turístico de Bourbon Street. La música como alimento para el alma pero no siempre para el estómago, lo que obliga al músico a buscarse la vida por otros rincones. Treme nos muestra el racismo de raíz del Sur de los States, no solo por el color de la piel, sino también por la condición social. La desorganización de los gobernantes, la corrupción asumida desde la escala más pequeña a la más alta, desde ambiciosos empresarios hasta el cuerpo de policía  en una New Orleans post Katrina.

Treme no cae en el cansancio porque acierta repartiendo su argumento entre distintos protagonistas y sus respectivas historias que a veces se cruzan, la mayoría de forma natural. Treme enraíza la tradición y el día a día, ese sentimiento impregnado en el alma de preparase para su fiesta grande, momento marcado a fuego en el calendario vital y que tan bien puedo llegar a comprender, porque también lo vivimos en este mi Sur del Sur. Mardi Grass como redención de los pecados y comunión dela carne. La muerte tan presente en la vida como la piel y el hueso. Y por supuesto siempre la música, omnipresente en cada episodio, prácticamente en cada instante. Imposible no disfrutar, no sentir la necesidad de formar parte de ese gentío que se expresa a través del sonido que mana de los instrumentos musicales. Treme es a veces entrañable y otras muchas cruda. Como en la vida, no siempre los héroes triunfan, pero eso si, su banda sonora es inmejorable.