AXEL RUDI PELL - Lost XXIII (2022)

Joder, 21 discos lleva ya el guitarrista alemán Axel Rudi Pell. De verdad que recuerdo casi como fuese ayer mismo cuando salió su primer disco, "Wild Obsession". ¡Pero fue en 1989!. En aquel disco cantaba Charlie Hunn, un tipo al que nunca me canso de reivindicar porque tiene un puñado de discos grabados, bien con Ted Nugent, Gary Moore o con Victory que a mí personalmente me encantan. Un tipo con una voz peculiar, algo que me gusta en demasía. Y si, ese disco lo disfruté muchísimo, seguramente el que mas aunque luego el guitarrista haya sacado cosas mejores - y también, no diré peores pero que no han terminado de convencerme. De todos modos, Axel Rudi Pell, es de esa clase de músicos que mantiene un nivel bastante alto en todos sus discos, y aunque a veces quizás uno pueda encontrar síntomas de reiteración en alguna que otra grabación, y que nunca ha terminado - o esa siempre ha sido mi impresión - de escalar al Olimpo sagrado de los guitarristas alabados y admirados por el mundillo, es decir, prensa y fans en general, desde luego Axel, fiel al hard rock de corte clásico, ha sabido mantener y cultivar su esencia.

Para este "Lost XXIII" ha contado en las voces nada mas y nada menos que con Johnny Gioelly, otro al que descubrí hace muchísimo en aquel primer disco de Hardline, con Neal Schon a la guitarra y que nos mostraba a un vocalista excelso. Que además ande por aquí el bueno de Bobby Rondinelli, no os voy a engañar, es un aliciente más, que nunca he negado de dónde vengo ni dónde me gusta pacer. ¿Tenéis dudas de lo que vais a encontrar en este disco?. Ya me parecía. Heavy rock con grandes dosis de melodías, un vocalista descomunal y un guitarrista que sin excesos innecesarios, demuestra tener claro, desde hace mucho además, cuál es su camino y por dónde siente que debe caminar. El hechizo de Blackmore, bien con Purple, bien con Rainbow se extiende cual hechizo del que de una manera u otra, siempre queda vestigio, aunque sea gestionado de la manera tan fabulosa que lo hace Axel Rudi Pell y oye, nunca se reivindica ese legado surgido desde la Purpura Profunda lo suficiente por mucho que se haga una y otra vez.

Y aunque nos tengamos que tragar al inicio la intro de rigor - no oculto lo poco que me gustan las intros estas en los discos - un potente riff pone las cosas en su sitio y toca disfrutar con ese sonido característico tan propio y ajeno a la vez. Sin lugar a dudas, "Survive" es una gran manera de comenzar un disco y tanto Pell como Gioelly destacan en sus parcelas. Es evidente que "No compromise" se niega a descubrir nuevos universos sonoros en el espectro de Axel Rudi Pell pero es que tampoco hace falta, fuerza y melodía, de esas canciones que provocan puños en alto. Aunque tenemos baladas como "Gone with the Wind" o "Fly with me" donde sin ningún tipo de duda se disfruta al máximo de la voz de Gioelly que aprovecha para atraer sobre si el protagonismo, Axel Rudi Pell ha metido en este disco bastantes canciones donde endurece su sonido y que a veces te hace retraerte a sus primeros lanzamientos como es el caso de "Follow the beast" en la que esa guitarra escupe fuego y la forma de cantar de Gioelly me trae a la cabeza a Jeff Scott Soto con Yngwie Malmsteen en los grandes momentos del sueco o "Freight train" donde se acerca a ese hard rock rocoso, con una batería estupenda. Si recordáis lo que comentaba más arriba sobre Richie Blackmore, escuchad atentos "The rise of Ankhoor".