Le había perdido un poco la pista a Sôber y mira que es una banda que he disfrutado muchísimo, desde que eran Sôber Stoned, sí, me voy a pegar esa sobrada porque es cierta y ya por entonces comencé a comprar sus discos. Aunque todo el mundo les achacaba el exceso a Tool, que yo tampoco lo encontraba tan exagerado como alguno afirmaba, nadie puede negar que abrieron brecha dentro del metal alternativo o como coño quieras llamarlo y que han servido de influencia a muchas bandas que han llegado detrás, incluso en la evolución de su sonido y etapas. Luego llegaría el éxito, aquella canción sonando a todas horas en la radio, llegando a gente que nada tenía que ver con el público primigenio de la banda - algo que a mi me parece de puta madre pero que ya sabéis como nos las gastamos los rockeros muchas veces con estos asuntos - historias dentro y alrededor, más discos, giras, proyectos... retornos. Algo al final mas habitual de lo que pueda parecer en este cíclico mundo de la música que trata de sobrevivir por los complicados caminos donde no se abren las puertas - incluso aunque se hayan llegado a abrir de par en par en alguna ocasión - de los mass media que funcionan por modas, rachas de vientos y mercantilismo puro y duro.
Pero mira, resulta que la semana que viene, Sôber estarán en San Roque encabezando el San Rock 2022 donde compartirán cartel con Bourbon, Vástago y Eleven360 dentro de su Elegía Tour 2022 lo que ha resultado una buena excusa, no solo para recuperar el viejo material de la banda que por cierto, en esta gira están tocando canciones de las tres décadas que llevan acumuladas a la espalda y la verdad, el toparme de frente con canciones del disco "Morfología" me pone como una moto. Como decía, recuperando grabaciones y haciéndolas sonar a tope en mi maltratado y envejecido equipo de música, pero también echando en falta el haber prestado atención a "Elegía" el disco que editaran el año pasado y que reconozco que me ha sorprendido muchísimo.
"Elegía" es oscuro y ampuloso a su propia vez. Épico por momentos, cristalino en otros. Melodías conjuntadas y trabajadas en favor de unas canciones que se compenetran a la perfección durante todo el disco creando una atmósfera de conjunto incluso con la equidistancia que separa a cada una de ellas adueñándolas de personalidad propia. "Elegía" recupera ese metal tan inoculado en su interior para diluirlo en precisas dosis que se mezclen de manera maestra con la abundancia de melodías tan reconocibles como deseadas que junto a los arreglos de las canciones van creando capas que desfloras con atención para no perder detalles. Sôber poseen ese algo que los hace especial, que pueden gustar o no, atraer o despedir posibles seguidores según la tonalidad escogida para el pincel con el que se prestan a crear cada obra nueva. "Elegía" es un disco reconocible, porque en él reconocemos pasajes vividos en distintos tiempos del grupo, creemos identificar el sentimiento de pertenencia a tal o cual época pero termina convenciéndote de que todo forma parte de la siguiente manera del grupo por entender su forma de hacer canciones. Ah, la prueba de lo dicho al comienzo.
Comentarios