The Dry Mouths - Thödol (2022)



Supongo que los estados de ánimo se balancean en una cuerda invisible que siempre cuelga sobre el abismo dependiendo de cómo sopla el viento de las circunstancias. Me decía mi querido Ángel que últimamente piensa mucho las cosas y yo le respondía que a veces cuando uno piensa demasiado, aunque tome la decisión correcta, se deja cosas atrás incluso si estas puedan estar equivocadas. Que no siempre lo que te da cancha tiene porque tener la receta extraordinaria del acierto infinito. Ya sabéis que la vida es esa cosa tan maravillosa y a la vez tan cruel que cuando crees que te vas directo al fondo te da un empujón para que cojas aire y cuando crees que nada puede ir ya mejor, te hunde la cabeza no sea que olvides que la distancia hasta el suelo es la de un simple traspiés. Me lo guardo en el bolsillo de los callejones en dirección prohibida, aquellos que escapan de los sueños y miedos futuros para llevarte a la posada donde se acarician los instantes compartidos e incluso los que brinda ese extraño animal de compañía llamado soledad. En inglés, la abismal diferencia que abarca en si misma la soledad posee dos palabras con la que distinguirla, loneliness y solitude pero nosotros tenemos que evaluarla con el árido contraste de una misma palabra.

Las percepciones juegan con ventaja, la de no tener que dar explicaciones razonadas. Las vistas cambian al otear el horizonte que el poniente no siempre deja el mismo sabor en el paladar. A pesar de llevar la sal incrustada en los huesos me dejo seducir por el inusitado roce calloso del desierto. Cambio de acera porque el desierto que desafía mi sed de sonidos metamorfoseados en él no reside en California sino que vira al Mediterráneo para brotar en Almería. The Dry Mouths son viejos conocidos de este blog donde llevan ya mucho tiempo siendo capaces de remover emociones en este que intenta encontrar palabras con las que definirlas.

The Dry Mouth tienen un camino marcado por el que briegan a conciencia sin tropezar dos veces con su misma piedra. En su forma de transformar canciones vive un fuerte efluvio onírico que abre sus alas a tu mente para que inicies un viaje iniciático sin retorno. La limpieza de sus acordes convive a la vez con una herencia pesada de sonidos desérticos que aplican a su propia manera para escapar de manoseadas estructuras por muy exitosas que puedan resultar a primera vista.

“Thödol” es una ventana abierta de persianas echadas no del todo que filtran la luz en su justa medida pero no permiten que la oscuridad escape para siempre de un círculo vicioso donde ambas se necesitan. “Thödol” es un nexo, un cruce de camino donde convergen el post rock, la psicodelia y el stoner de manera que giran y giran hasta crear una manera donde no desean distinguirse a pesar de quedar bien clara la procedencia de cada uno de ellos. “Thödol” es paz, melancolía, tristeza, esperanza y sí, soledad, a veces impuesta otras deseada.


Comentarios