LOS DIEZ DE XABEER -VIVID REMORSE-

Vivid Remorse se han marcado uno de esos discos de thrash metal para tener presente cada vez que pienses en el género. Su "Down to the wire" pasó por el Motel, arrasando a su paso. Ahora su bateria, Xabeer nos recomienda diez discos que deberiamos escuchar si o si. Atentos a la lista, porque no tiene desperdicio. Eso si, Xabeer advierte que no hay orden de preferencia, así que os transcribo la lista tal como la he recibido.

Álbum rojo/Álbum azul (The Beatles): Con ellos descubrí el maravilloso mundo de la música o cómo mediante la combinación de acordes de guitarra y enormes melodías vocales podías llegar a sentir cosas indescriptibles…nunca agradeceré lo suficiente a mi padre que pinchara este doble álbum en el vinilo en casa cuando era pequeño. Si la Humanidad tuviera que escoger un solo trabajo de música moderna y popular en el siglo XX seguramente sería éste.

Loco Live (Ramones): Los puristas del género dirán que es un disco demasiado acelerado, que distorsiona demasiado los álbumes originales y que para directos es mucho más fidedigno el It’s Alive…me da igual, los descubrí con éste y gracias a ellos vi que lo sencillo (tres acordes) puede ser grande si encima hay melodías de voz que llegan.

Images & Words (Dream theater): De un extremo al otro…de lo sencillo a lo elaborado. De Ramones a estos genios del metal progresivo que demuestran que virtuosismo y calidez se pueden mezclar perfectamente para hacer una obra maestra absoluta. 

L’últim segell (Sangtraït): Si con los Beatles descubrí la música, con este tercer álbum de esta gran banda catalana de hard rock/heavy metal descubrí la música “dura”. El primer disco de metal que escuché en mi vida si no se tiene en cuenta el mítico The final countdown the Europe, que cualquiera de mi generación (o superior) poseyó en su tiempo.

Master of puppets (Metallica): Para mí, el mayor disco de metal de la historia. Lo tiene todo: velocidad y medios tiempos, caña y sentimiento, melodías vocales y melodías de guitarra, grandes punteos, grandes progresiones…de todo. Insuperado y, lo que es peor (o mejor, depende de cómo se mire), insuperable. 

Tokyo tales (Blind guardian): No me gusta poner directos en clasificaciones de “top 10” como ésta, pero los Ramones han abierto la veda y no seré yo quien les lleve la contraria. Además, como es casi imposible quedarse con una sola obra de los germanos, elijo este discazo, que es con el que los descubrí: son al power metal lo que Metallica al thrash: la perfecta combinación de tralla y melodía. Además, Blind guardian me hizo ver que había más vida más allá de los de San Francisco, tras años enganchado a ellos cual drogadicto. 

Absurdities (The toy dolls): ¿Un album de punk no solo divertido sino que además cuyo guitarra supera al 99% de los guitarristas de metal? Pues sí, es posible. Sobre la base del rock’n’roll de toda la vida, estos cracks le dieron un toque entre el punk y los dibujos animados para un álbum fundamental. 

Mesmerize (System of a down): Los puristas de la banda dirán que con este disco el grupo ya estaba en pleno declive…para mí es una obra maestra total, cuyo mayor mérito es juntar todo tipo de música (y cuando digo todo, incluyo desde heavy metal a la música folklórica armenia) para lograr lo que debería soñar y buscar todo grupo: crear un estilo único y reconocible. 

Killers (Iron Maiden): Seguramente tiene discos más conocidos (The number of the beast) y más elaborados (Somewhere in time), ambas obras maestras, pero los descubrí con este disco fundamental y de ahí mi elección. Tiene un poco de todo pero, sobre todo, un toque de macarrismo respecto al metal tradicional más pulido. 

 

Symbolic (Death): Un estilo único de tocar la guitarra, unos riffs muy melódicos y trasheros en contraste con la voz gutural del genio Shuldiner y una batería, la de Hoglan, de otro planeta, para el que para mí es el mejor álbum del género death metal de la historia.