INBLAUK...LOVE & DUST

"Somos los Platero pa lo bueno y pa lo malo, hacemos rock and roll y no somos americanos" cantaban Platero y Tu hace mucho, y con toda la razón del mundo. El rock perdió la denominación de origen hace ya tanto que ni me acuerdo, la Route 66 sigue comenzando en Chicago, pero desemboca en cualquier barrio de cualquier ciudad del mundo. No se puede negar, que aquellos que vienen de mas allá del Pacífico, siguen teniendo ese no se qué, que los distingue. Pero no es menos cierto, que mucha gente en cualquier rincón ha heredado ese sentimiento como suyo y como inherente a su forma de ver la música.

Y uno de esos lugares donde te puede llevar la Ruta 66 es Salamanca. Puede que por su plaza mayor corran tunos en vez de bolas de heno empujadas por el viento, y que no se escuchen el relinchar de caballos, pero en sus calles, suena una música que parece haberse perdido de su Nashville natal, para terminar en la ciudad universitaria por excelencia. Sobre InBlauk me dio norte el DR. R. Perkins, que me llevó a indagar en este cowboy salmantino, escuchando su primer disco, "Wild way", un disco que me dejó sorprendido, porque no esperaba ese ataque frontal con una música tan netamente americana.

InBlauk es el alter ego de Juanma Tio, que al mas puro estilo outlaw, con su guitarra acustica, cuenta historias que hace tiempo solo pasarian bajo el fuerte sol de un desierto texano. InBlauk es country acustico, que a su vez suena demoledor, aquí no hay tiempo para tiempos tiernos, que esto es música de curtidos cowboys, pero a su vez, yo encuentro al rock soterrado en su guitarra, como le puede pasar a Bob Wayne, con quien por cierto compartió hace poco escenario.

InBlauk nos trae su nuevo disco, "Love & Dust", 17 temas (bueno yo tengo la versión con 18 que me hizo llegar el propio Juanma, gracias man), que abre con "Black snake bite". La primera vez que escuché este tema tuve un flashback, vi a ese chaval de 9 o 10 años, que bocata de chopped en mano y sentado en el sofá, disfrutaba por las tardes de los westerns que emitia tve. Pero además este "Black snake bite" me suena muy rockero en la forma de cantar de Juanma. "My friend" lleva un violín bestial metido por Alejandro Guinaldo, una canción ante la que cayó rendido Bob Wayne cuando compartieron escenario.

Me encanta "Roag King", suena sincera, un storyteller del lejano oeste que desborda ganas y sapiencia por cada poro. Como me gustaria ver la cara de aquella gente que piensa, que el country en este pais es esa bazofia de Coyote Dax o como se llame. Sin lugar a dudas el trabajo de  Alejandro Carbayo con su Guild de 12 cuerdas y coros ,  Javi Amado en el bajo, David Martínez y Carlos de la Calle en la batería , Alejandro Guinaldo al violín  y  Miriam Martín al piano, es simplemente fabuloso, haciendo que suene de muerte este "Love & Dust". Si alguien tenia dudas, solo le recomiendo escuchar "Sentenced to death", una lenta y oscura letania camino de la horca.

"One night" suena desafiante, con una mano en su guitarra y otra en su revolver mientras canta a la audiencia.  "Complaint called boyfriend" te lleva de cabeza al saloon, con su aire festivo, de nuevo con el violín haciendo diabluras y todos esperando que termine el tema y acabe la ronda de whiskey para comenzar una pelea en el saloon. Este disco no es solo actitud, también está tocado de una manera excelente. Solo hay que escuchar las guitarras de "You don´t answer" para convencerse, una canción que enlaza con el lado rock del country.

"Summer girl" nos enfila hacia el verano, repleto de melodias. "Love as  drug" aparece en el promo con dos versiones, la que va en el disco y otra instrumental, que te da la opción de disfrutar y de que manera, de la forma de tocar y de sus composiciones. "Only one way road" tiene unas guitarras que no me puedo quitar de la cabeza, mientras relata historias que nadie imaginaria nacén del corazón de este outlaw charro, en vez de un tipo de  Arkansas. Camarero, otra ronda de agua de fuego, que vamos a bailar con "Secrets" y "Western saloon grooves", está ultima un jazz pasado por las arenas de Arizona.

Bob Wayne declaraba que Johnny Cash le salvó la vida. No sé si a InBlauk le habrá pasado lo mismo, pero de lo que si que estoy seguro es de que ha seguido sus enseñanzas, así como las de Hank Williams o Waylon Jennings. A partir de aqui, el disco toma unos derroteros mas suaves, mas relajados pero no menos intensos.  "Fly to the other side" refleja que el feeling que lleva este tipo dentro, con una intimista balada. "Still it's not my time" sigue ese sendero que refleja la forma de ver las cosas cuando salen de dentro. "Night life" seguro que suena de muerte en algun bareto sentado a escasos metros de InBlauk, con ese estribillo que te invita a levantar tu vaso, brindar e intentar cantar.

 

"Blues out of time" y "Farewell" despiden este "Love and dust", disco que recoge perfectamente lo que vas a encontrar en el, dos partes, love, con la final, mas accesible y refinada, y una primera, dust, que suena salvaje, campestre y agreste, como la vida en el viejo far west. El mundo de la música es complicado, y mas en un estilo como el country en nuestro pais,  con un público mas interesado en lo que viene desde el lugar de origen de esta música. El viernes verá la luz este disco, que dejá un gran sabor de boca, bueno un sabor seco, que para eso es música del desierto.