BUCKCHERRY - FUCK. UN CORTE DE MANGAS A LA INDUSTRIA MUSICAL

Ya lo comentaba hace poco, cuando hablaba del crowdfunding de ElDorado. Resulta casi doloroso, que grandes bandas, se vean sin posiblidades de grabar sus discos, a no ser, que se busquen la vida de mil maneras. Nos quejamos de que ya no habrá un "Hysteria", un "Black Album" o un  "Appetite for destruction", pero es que ya, casi ninguna banda, puede permitirse encerrarse diez o doce meses en un estudio de grabación, no hay un soporte económico detrás, y aunque lo hubiese, este se comería el destinado a publicidad y marketing. Por no hablar, de que ya muchos músicos, no pueden dedicarse en cuerpo y alma a las canciones, sino que graban en los ratos libres, porque amigos, la inspiración es una cosa muy bonita y poética, pero no llena barrigas ni paga facturas. Los músicos de rock ya no destrozan habitaciones de hotel, porque las pasan de largo, conduciendo toda la noche de regreso a casa, tras un concierto.

¿Quién tiene la culpa el desmoronamiento de la industria musical?, yo no lo sé, ni tengo las respuestas, pero muchas veces pienso, que ocupamos demasiado tiempo en señalar sospechosos y muy poco en buscar soluciones. La gran señalada, es la descarga de discos por Internet. No seamos hipócritas, todos bajamos música. Quién esté libre de pecado, que tiré el primer mp3. Hay gente que ha encontrado un oasis en servidores, donde puedes encontrar hasta la maqueta de la banda de tu barrio. Gente que llena sus discos duros de discos sin cesar, pero que hace muchísimo que no se dejan cuatro pavos en un disco físico, que no sienten el placer de quitar el plástico y abrirlo, antes de enchufarlo a tu equipo. Acaso no comprendemos que es la pescadilla que se muerde la cola. El día que las bandas se cansen, de no sacar siquiera para cubrir gastos, o al menos una parte, que comprendan o decidan, que no les merece la pena meterse en un estudio de grabación, o al menos, el editar más de una tirada corta de copias que les valga de promoción, ¿de donde vais a bajar discos?.

Pero no nos quedemos en el objetivo fácil, porque la propia industria musical, se ha auto inmolado, por mucho que les pese. En los tiempos de vacas gordas, nos han tratado como gilipollas, cobrándonos por un disco lo que les daba la gana, sin molestarse en muchos casos, de incluir un simple libreto con las letras de las canciones. ¿Para que?, sabían que íbamos a comprar con los ojos cerrados, a arañarnos la pasta del bolsillo, comprando con fe ciega en esos músicos que adoramos. Pero cuando se les vino encima el cambio, les pilló con el paso cambiado, y muchos no fueron capaces de reaccionar. Y lo peor de todo esto, es que detrás de esas discográficas que se fueron al garete, había muchas caras anónimas, que pasaron a engrosar ese drama que es la cola del paro. Ahora las discograficas, la mayoría, solo apuestan por lo seguro, por lo que saben que les devolverá, aunque sea sin creces, la inversión, sin importarles, la calidad de la apuesta, ni buscar una opción de futuro, o tan siquiera de presente. Es cierto, que la industria de la música, se puso a si misma el revolver en la sien, pero no estéis tan tranquilos, porque nuestras huellas, también están grabadas en el gatillo.

Siempre quedan los conciertos, claman algunos al cielo, ahí es donde el músico debe ganarse el pan. Ok, es su medio natural de vida, pero no olvidemos, que los discos son la llave, la carretera al cielo, o al infierno. Dejémonos de excusas, no os voy a decir que compreis discos a mansalva, la situación es jodida, yo mismo, me cortó desde hace tiempo, de gastar las cantidades que me dejaba antes en las tiendas de discos, he tenido que reducir mi presupuesto y ser más selectivo. Además, nunca me han gustado las moralinas, y no soy quien para predicar ni decir que hacer, eso lo dejo a vuestras conciencias y vuestras ganas, faltaría más, pero al menos, seamos consecuentes, no busquemos culpables en campos ajenos y pasemos la vista de largo en el nuestro propio. Porque es descorazonador, hablar con músicos y que todos coincidan en lo jodido que está la venta de discos. Pero es que es algo, que te cuenta desde la banda más humilde a gente como el propio Josh Todd de Buckcherry, una banda que se deja los huevos en la carretera, y que están cansados de este camino de espinos.

 

Cansado de ser una eterna promesa, de que medios y fans, se derritan en halagos hacia ellos, pero que sea la misma vieja situación, sin que nadie apueste por ellos a la hora de la verdad, a pesar de que han demostrado de sobras, su valía. Así que se han liado la manta a la cabeza, y antes de grabar un nuevo disco, que dice Todd, que quiere ser como las bandas de los 70, sacar un disco por año, han grabado este ep, en el que el vínculo común es la palabra fuck, que aparece en todos y cada uno de los títulos de las canciones, incluida una versión de ese tema pop, que estoy hastiado de escuchar en todos lados, y que ahora he descubierto que es de unos suecos llamados Icona Pop, que se llama "I love it", y que Buckcherry han bautizado como "Say fuck it", y que por cierto, les ha quedado bastante molona. Seis temas para disfrutar con una de las mejores bandas que ha dado el hard rock a partir de mitad de los 90 y para alzar tu dedo, y dedicar un enorme que te jodas a quien os de la gana. Ellos se lo dedican a todo el negocio musical y lo que les rodea.