PÏMEA METSÄ - No blood no glory

Despúes de tantas series, pelis, libros... tenemos claro que los vikingos nacen donde quieren, ¿o no?. Una fría noche de diciembre de 2006, entre cervezas, un grupo de amigos decide montar una banda de viking metal, inspirada en las historias del norte de Europa pero asentada en la capital del reino, así son las cosas, la música no entiende de fronteras ni de partidas de nacimiento. En 2007, David (guitarras), Juan (bajos) and Miguel (teclados) se ponen mano a la obra y comienzan a componer las primeras canciones de la banda. Numerosos músicos van desfilando por la formación, hasta que en 2008 parece que por fin consiguen la estabilidad necesaria con la llegada de Ángel, Hugo y Pablo. A pesar de que hasta entonces no habían conseguido una formación estable, si que habían seguido componiendo canciones y arreglando las primeras que compusieran en los momentos iniciales. La banda debuta en directo en 2009 en la madrileña Sala Silikona, ante 170 personas. Durante ese año, distintos amigos de la banda, se van haciendo cargo del bajo en los conciertos hasta la llegada de Juanto, con el que debutan en Madrid en la Sala Live.


La energía de sus directos les hace ganar una gran reputación, así que de nuevo entre cervezas, deliberan y deciden grabar su primera demo, "Beneath the northern lights", que ve la luz en febrero de 2010. La demo consigue buenas críticas que le valen para tocar con gente como Kathaarsys, Korpiklaani, Trollfest o Norhtland entre otros. En 2013 se conjuran para crear su primer larga duración, aunque no sería hasta 2014 cuando saldría "Legacy of the heathen north". Lo presentan tocando con gente como Vikingore o Suidakra y participando en festivales como Winds of North, Heathen Myth y On Fire Metal Fest. Durante 2016 comienzan a componer las canciones para su nuevo disco, iniciando una campaña de crowdfunding, y una vez conseguido, con la "No blood no glory" en sus manos, Pïmea Metsä dan un salto adelante, al fichar por el sello italiano Wormholedeath, y amigos, aquí tenemos esta segunda andanada de la banda.

Abren con la instrumental "Havamal" que da paso a "Vikings creed", con un sonido muy sinfónico al comienzo enlazando con intro, hasta que se lanzan a deguello, voz gutural y partes propias del power metal y ese estribillo épico. "Thunder god" suena mucho más rápido, puro metal vikingo, con una estrofa cortante, buscando esa épica hímnica. "Nothing can stop our strike" destaca por las guitarras, con reminiscencias del heavy metal clásico mientras que vocalmente entrelaza partes guturales con otras más melódicas. "Einherjer" suena rica en matices, gracias a la instrumentación, de nuevo moviéndose en páramos propios del epic metal, con una estrofa que tiene muchísima fuerza. "Berserker" es un tema himno, con un cambio brutal, que le mete en profundidades extremas. "Grendel (Beowulf chant I) suena instrumentalmente más pausada, más heavy, mientras que la voz vuelve a meter unos guturales intercalados, que quedan realmente bien.

"Call to arms" es puro folk metal, solo hay que escuchar esas guitarras, ese aire de trovador llamando a la guerra. "Alba gu brath" curioso, porque esta instrumental, abandona el frío norte europeo para cruzar el mar hacia las montañas escocesas. "Cry for freedom" cierra el disco a toda velocidad, mostrando la cara más potente de la banda, y es que realmente, estos tipos se defienden igualmente cuando acometen momentos más extremos o cuando se desarrollan en terrenos más propios del heavy metal o el power. Una banda muy interesante y un disco a tener en cuenta.


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