STEEL PANTHER - Heavy metal rules

A estas alturas del partido aún no se si debo tomarme demasiado en serio a Steel Panther. Ojo, porque no se si realmente son una parodia o el vehículo que han utilizado con inteligencia para hacerse un hueco incluso entre gente que normalmente no está excesivamente abonada al hard rock. Lo que está claro es que su música si hay que tomársela en serio. Seguramente las letras no tanto. ¿O si?. En estos tiempos en los que cualquiera se molesta por casi todo, la diversión "mal intencionada" de Steel Panther puede que sea malinterpretada. Y eso al final casi les viene bien, porque como dijo Gene Simmons, habla de mi aunque sea mal, pero habla. Steel Panther a estas alturas no necesitan presentación. Ni creo que nadie inmerso en este mundillo dude de por donde van a salir ahora. Lo suyo es el hard rock ese que alguno llamaran desfasado y que otros como yo seguimos disfrutando como si nos fuese la vida en ello. Que hayan llamado su disco "Heavy metal rules" en una época en la que la palabra heavy  parecen mucho querer decirla con la boca pequeña, les hace ganar puntos conmigo. ¿Que carajo es el metal?. ¡Heavy metal, queridos amigos!.

Las estrellas en principio se alinean a su favor. Otra cosa es cuando llegue l momento de la verdad. Las canciones cobrando vida propia. Después del spoken de rigor titulado "Zebraman" comienza bien la cosa con la hard rockera "All I wanna do is fuck (myself tonight)" y su estribillo descarado aunque ese "soniquete" que se cuela en él me ponga de los nervios. "Let's get high tonight" no me engancha, me termina cansando y mal asunto porque solo llevo dos canciones del disco. "Always gonna be a ho" debería ser la power ballad de todo disco de este tipo que se precie, pero... no es que no resista una comparación con "Every rose has it thorn", es que ni bajando el listón. "I'm not your bitch" suena potente, tirando de riffs y esa voz a lo Dokken. Mejora la cosa. "Fuck everybody" no está mal, tiene ese rollo melódico en la mitad de la canción y el punto descarado del estribillo. "Heavy metal rules" busca estructuras más heavys pero le falta algo, no termina de enchufarme a pesar de que el estribillo con ese guiño a lo Ozzy mola.

"Sneaky little bitch" pretende sonar a lo Aerosmith, pretende. "God of pussy" se salva de la quema por los pelos gracias a ese riff -y es que posiblemente las guitarras sea lo mejor de Steel Panther- para terminar con "I ain't buying what you're selling" una acertada acústica cuya letra se aleja del concepto que pretenden vender para ponerse serio y mira tu, pues lo hacen bastante bien. Steel Panther me provocaban una sonrisa en sus primeros lanzamientos pero poco a poco han conseguido que me abone a la indiferencia, y no por falta de sentido del humor sino porque la gracia consiste en algo más. Con Steel Panther me pasa como con Ghost. Tengo la impresión que son bandas para gente que no quiere ni pretende ahondar en el mundo del hard rock, más allá de la anécdota mediática que estos pueden llegar a representar y lo peor de todo, es que terminan cerrando puertas a bandas que si que ponen la carne en el asador. Una decepción.